Tel Aviv, 9 de enero, RIA Novosti. Rusia va recuperando poco a poco su posición de importante proveedora de armamento y material bélico a los países del Medio Oriente y, a un mismo tiempo, demuestra la capacidad de hacer frente a las presiones políticas por parte de Occidente, sostiene Iftah Shapir, experto israelí en temas de seguridad.
Esta tendencia, según él, se ha puso de manifiesto en la venta de cazas MiG-29, Sukhoi-30MK, aviones de instrucción y combate Yakovlev-130, carros de combate T-90 y sistemas de defensa antiaérea S-300 PMU-2 a Argelia, por valor total de US$7.500 millones de dólares, así como en otros contratos recientes, con Siria e Irán, que han tenido amplia resonancia a pesar de que su importe es más modesto.