BBC Mundo, enviado especial a Trinidad y Tobago
Cuba
parece estar dando la medida del éxito de lo que algunos han llamado
"la nueva diplomacia estadounidense", la aproximación en política
exterior con la que el presidente Barack Obama quiere mejorar las
relaciones hemisféricas.
A juzgar por el tono de las declaraciones de los líderes regionales, Washington está pasando la prueba.
Como
se esperaba, Cuba es la mayor prueba a la que se está sometiendo esa
oferta de mejor entendimiento de la Casa Blanca. Y a juzgar por el tono
de las declaraciones de los líderes regionales, Washington está
"pasando la prueba", por ahora.
"El gran
test era un avance en relación a Cuba. Creo que fue dado un paso
pequeño en la dirección correcta." dijo el canciller de Brasil, Celso
Amorín, en rueda de prensa al final de la reunión de la Unión de
Naciones del Sur, Unasur, con el presidente Obama.
Y
ante la ausencia de una delegación cubana con la cual medir el
acercamiento, muchos ponderan los cordiales intercambios que han tenido
el presidente Obama y su colega venezolano, Hugo Chávez.
Incluso
el mandatario venezolano aseguró a la prensa que "está pensando"
designar un nuevo embajador en Washington, cargo que está vacante desde
que en noviembre de 2008 Caracas expulsó al representante
estadounidense en "solidaridad" con Bolivia, que también echó al
embajador en La Paz.
Amorín considera
que los próximos pasos deben conducir a un diálogo directo, e incluso
aseguró que el presidente Luis Inacio Lula Da Silva considera "muy
difícil que haya una nueva Cumbre de las Américas y que Cuba no esté
presente".
El presidente uruguayo Tabaré Vásquez dijo a los periodistas que "el presidente Obama quedó en estudiar este planteamiento".
Mutua confianza
Chávez le regaló a Obama un ejemplar del libro "Las venas abiertas de América Latina".
Pero Cuba es sólo la medida de cómo se ha dado desde el primer momento
la interacción entre los presidentes americanos en un ambiente de
camaradería y cordialidad que no todos esperaban, sobre todo quienes
recordaban la experiencia de la Cuarta Cumbre de las Américas de Mar
del Plata, Argentina, en 2005.
En palabras
de la presidenta de Chile, Michelle Bachelet -quien ejerce la jefatura
temporal de Unasur- la reunión está fortaleciendo la confianza mutua.
"En
esta reunión hemos entendido que es una primera fase de la construcción
de confianza en un cambio de la relación de Estados Unidos con América
del Sur", dijo Bachelet.
Alan García,
presidente de Perú, expresó en tanto que Sudamérica no llegó al
encuentro "con una posición mendicante", aunque recalcó que la región
está fuertemente conectada con la economía de Estados Unidos y es
importante para su recuperación.
"Esperemos
que ahora todas estas cosas que hemos charlado se plasmen en realidad",
añadió, tras recalcar que "es una oportunidad histórica para cambiar la
Historia".
Evo desentona
Palabras menos condescendientes con la acción diplomática de los EE.UU. las tuvo el presidente boliviano Evo Morales.
Según
dijo Morales en una rueda de prensa este sábado el gobierno
estadounidense sigue "conspirado" contra su gobierno pese a la
estrategia de acercamiento con la región de la que habla el presidente
Obama.
Chávez aseguró a la prensa que piensa designar un nuevo embajador en Washington.
Morales
se refería al supuesto plan para asesinarlo del que las autoridades
bolivianas informaron el jueves y que terminó con un enfrentamiento en
el que la policía mató a tres supuestos magnicidas: entre ellos un
irlandés y un rumano.
El gobierno
boliviano no ha acusado directamente a Washington del frustrado plan de
magnicidio, pero Morales dijo haber pedido a Obama que repudiara
públicamente la acción y que en caso contrario "podría llegar a pensar
que la embajada estadounidense está involucrada".
"Obama
dijo tres cosas. No hay socios mayores o socios menores. Dijo que las
relaciones tienen que ser de mutuo respeto y habló de cambio" dijo
Morales, pero se quejó de que "en Bolivia uno no siente cambio alguno.
La política de conspiración continúa".
Tono más respetuoso
"Con
la habladera no se hace nada", dijo a BBC Mundo Tomás Laudún, de la
Alianza Social Continental, un colectivo surgido como oposición a los
planes de libre comercio hemisférico que impulsaba Washington.
Sin
embargo, Laudun estima que la reunión con Unasur es una señal positiva
que considera un cambio diplomático importante porque asegura que
Washington "antes no era respetuoso de esos espacios y alianzas del sur.
La
Alianza Social Continental presentó la víspera al gobierno
estadounidense una lista de puntos que considera necesarios atender
para mejorar efectivamente las relaciones hemisféricas.
Con la habladera no se hace nada
Tomás Laudún, Alianza Social Continental
"Desmantelar
la Cuarta Flota y cerrar las bases estadounidenses en la zona. Cesar la
interferencia en procesos políticos latinoamericanos", considera Laudun
que son los principales puntos para eliminar la aproximación
"militarista" hacia la región de la que acusa a Washington.
Laudun
piensa que el acercamiento entre Obama y Chávez, y las declaraciones de
buena voluntad sobre el futuro de la relación con Cuba, son signos
esperanzadores.
Incluso le pareció buena idea el regalo del ejemplar de "Las Venas Abiertas de América Latina" que le hizo Chávez a Obama.
"Ojalá
que lo lea", dijo Laudun, pero cuando supo que el ejemplar está en
español expresó que "nos comprometemos en suministrarle al presidente
Obama la traducción inglesa del libro, si es que está interesado".